Cap. 38 La insoportable novia que me alquile
“La vida me sorprende, cuando todo parece ir mejorando uno mismo lo empeora todo”
Muchas fingieron alegrarse por ese hecho y Zeink más aliviado de quitarse la presión de encima de un noviazgo. Noah se le acercó contento:
—Ella me agrada papá.
Él asintió y cuando la reunión terminó pudo ir a casa a descansar, Adrián le preguntó:
—Papá, ¿cuándo yo me vaya a casar harán eso conmigo?
Intentó ser sincero:
—Todo depende de si encuentras a una compañera antes.
—Es que me dio vergüenza ver a todas esas mujeres queriéndose casar.
Hasta su hijo lo sentía incómodo, entonces Noah le preguntó:
—Te termino gustando Salma, ¿eh papá?
—Bueno, chicos, vayan a descansar.
Cuando quedó solo respiró hondo, nunca se casaría, se lo había jurado, el amor para los Fadel estaba vetado.
Aisha estaba pensativa, su padre entonces estalló en la casa:
—¡Cómo pudo escoger a esa…! ¡Esa que ni sabemos de dónde salió!
—¿Esperabas que me escogiera?
—Esperaba que te viera como una opción, ahora soy el hazmer