Capítulo 112. Sin discusión
En los siguientes días Marina y Gavin se sumergieron de lleno en las labores para el clan, había mucho trabajo que hacer, y gracias a las buenas relaciones entre los tres clanes los trabajos para reconstruir las carreteras se llevaban a cabo en remodelación total.
Marina se encargaba de las finanzas para el proyecto, Gavin de la preparación, Camila de administrar.
Marina y Camila no eran amigas, pero se encargaban cada una de su labor sin entorpecer a la otra.
Graham estaba hecho una pena desde que se fue Ana. Las cuatro enfermeras que se encargaban de Cris se habían quedado colaborando con él.
Debido a la desconexión por las carreteras atender enfermos que no podían ir a Edimburgo era un trabajo extenuante.
A Marina le había cambiado la rutina, se sentía triste porque no tenía ni Cris, ni Ana, ni Marisol.
La habitación de Cris había sido cerrada, Y Marina acudió a Elsbeth.
—Elsbeth, quiero la llave de la habitación de Cris.
Elsbeth la miró con preocupación.