Bastet.
Doy un suspiro con melancolía al ver que se asercan mis hermanas, se que ellas no se sienten del todo conomas aquí en una manada de lobos y de seguro su deseo será irse con ellos y no podré detenerlas o más bien no tendré el corazón para pedirles que se queden a mi lado y no sean felices, deben de buscar sus parejas y hacer sus propias vidas no siempre deben de estar sujetas a lo que dictan muestras costumbres, será una despedida dura les doy una sonrisa triste y ellas me abrazan con mucha dulzura y calidez.
-Las voy a extrañar.
-Nosotras no ya me nos quedaremos.
-En serio yo pensé que.
-Que te dejaríamos aquí solo con ese salvaje.
Me siento muy dichosa al escuchar esas palabras y siento como los ojos me comienzan a picar por las lágrimas que desean salir, odió estar tan sensible pero no lo cambiaría por nada del mundo.
-Te escuché Sharifa.
-Y tiene unos modales horribles no sabe los que es la privacidad.
-Cómo no quieres que las escuche Sharifa si estoy parado detrás