SAMANTHA

Después de unos dias, finalmente la prensa se habia enterado de todo, que el inalcanzable soltero, sexy y millonario Gabriel Ferrer, por fin se casaría, y sería con quien menos pensaban, supongo que esperaban ver a una rica y hermosa heredera, pero a cambio, me vieron a mí, una sencilla dueña de una tienda de vestidos de alta costura, lo sé la vida no es justa, imaginaba a Susana, más que furiosa por no haber sido ella, y a otras más por ahí, que anhelaban tener sus millones, y yo. . . yo sólo lo quería a él, sabía que, si por azares del destino, nos separabamos, rechazaría todo lo que viniera de él, aunque estuviera por escrito, firmado y sellado.

- Sam, creo que cuando te vayas, Carlos tendrá que escoltarte fuera de aquí.

-¿Porqué, hay algún problema? - pregunté distraída, apenas salía de mi oficina, había estado ocupada eligiendo un modelo para mi vestido y dibujando.

Ella señaló hacia afuera, habia fotógrafos apostados enfrente, ya habia empezado el show.

- Si, eso será