Capítulo 33: Relájate, Luna.
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Tras varios minutos de discusión, Cole ha accedido a que Danielle nos acompañe a los entrenamientos, aunque estoy convencida de que, a mitad del camino, se ha arrepentido de ello, pues Danielle, no para de enumerar los motivos por los que Cole debería ayudarla a prepararse para tomar su puesto.
Algo me dice que si las cosas fueran diferentes y sus intenciones fueran reales, mi alfa realmente la ayudaría, pero las intenciones de Danielle son tan evidentes…
Quiere pasar tiempo a solas con Cole.
–¿Qué hace aquí la princesa? –me pregunta Audrey apenas entro al campo de entrenamiento detrás de Danielle y Cole, quien parece fastidiado
–Parece que hoy hemos sido bendecidos y la diosa ha iluminado a la futura alfa de Vestigia –le digo en voz baja –Parece que hoy se despertó y dijo, “Hoy quiero ser una buena alfa para la manada que mi padre me dejó, así que dejaré de ir a las tiendas de marca y me centraré en mi preparación” –
–¿Enserio? –pregunta Audrey frunciendo el ceño
–Claro que no –