PDV: Moddie
A pesar de que había tocado la puerta varias veces no se digno en abrirla. Tal parecía que su molesta conducta hacia mi no pretendía cambiar.
Aguardando unos instantes por si cambiaba de opinión, la señora Miñonett se aproximaba hasta donde estaba.
—¡Carla! que gusto que hayas llegado—replico para saludarme cortésmente.
—Buenas tardes, señora Ann.
—Si Philips no te abre la puerta no te preocupes, debo hablar contigo en privado ¿Me acompañas a la cafetería?
—Desde luego—aunque respondí segura de mi respuesta temía equivocarme al responder lo que fuese a preguntarme.
Más tarde, al ubicarnos en la mesa que había escogido seleccionaba su orden, dejando a mi criterio lo que fuese a pedir.
—Descuida Carla, esto va por mi cuenta, asi que puedes pedir lo que gustes.
—Le agradezco y siendo asi pediré ese agradable chocolate que la vez anterior ordeno para mi, estuvo realmente delicioso.
—Bien, siendo asi, tráenos un café sin azúcar para mi y un chocolate especial para mi acompañan