Capítulo 81. Sí hay esperanza
Estaba amaneciendo y Aisha estaba despierta junto a Leonid en la cama, lo observaba durmiendo y se moría de ganas por acariciar su mejilla.
Aunque ella no emitió sonido alguno, él despertó.
Aisha se consiguió con sus ojos gris clarísimo y sonrió.
—Es hora —susurró ella.
—Que pase lo que tenga que pasar —murmuró Leonid y se acercó a darle un beso en los labios, antes de levantarse se acostó sobre ella y sonriendo besó sus ojos y nariz.
Aisha se echó a reír y Leonid acarició su cabello, finalmente se levantó y se metió en el baño.
Aisha se sentó en la cama y sintió que le movieron la cama.
Puso sus manos en el colchón aturdida.
— ¿Qué es esto? ¿Qué me pasa? —Murmuró impresionada por el extraño mareo que le causaba náuseas.
— ¡¿Has dicho algo?! —Preguntó Leonid desde el baño.
— ¡No! —dijo Aisha.
— ¡Estaba pensando que si antes de llegar a la manada veo a Alexey y hablo solo con él podría calmarlo!, ¡¿qué piensas?!
Aisha no le prestó atención a Leoni