Habían pasado unos días y aun no tenía respuesta de Alexis, pero por lo menos el dolor había disminuido considerablemente, además Aspen había estado a mi lado cada vez que podía al igual que mis amigos, lo cual me alegraba mucho.
Blaire y Matt me habían estado ayudando a estudiar o por lo menos esa era la excusa que usaban cuando venían a mi casa, porque la verdad era que me entregaban sus apuntes y el resto del tiempo hablaban o se besaban; pero, al final no importaba, me ponía feliz que ambos fueran felices.
Me levanté casi a las once y me encontré con los ojos de Aspen observándome