30. Dejando todo para vivir.
Una vez más estaba rendida a los pies de él. Era un círculo vicio donde todo terminaba en su amor y siempre volvían como el primer día.
Se apoya en la mesa mirándolos — Yo sabía que este lugar sería el refugio de la pasión — se burla de los dos.
—No cambias más con tus pensamientos — asegura Matt serio.
Sam le aprieta la mano para que no diga más nada — Tenemos que hablar — dice mirándolo a Sebastián.
Sam deja a Matt a un lado y camina por los pasillos que antes recorría con Sebastián pero ahora de forma más diferente a lo que era. Algunas chicas pasan hablando, terminando de cambiar de ropa y tomando alcohol.