[ALEXA]
(Al día siguiente: lunes)
La imprudente alarma de mi despertador me hace sobresaltar de la cama y entre medio de mi casi infarto precipitado, estiro mi brazo, la apago y me giro en la cama encontrándome con él y con una risa que intenta ocultar.
—Buenos días. — dice y finalmente ríe.
—Buenos días… no sé de qué te ríes. — digo intentando no reírme yo también de no sé qué cosa.