Camila
El rostro de Will es de completa satisfacción, su mirada se transforma por completo… esa mirada que me asusta totalmente.
Intentó agarrarle el brazo para separarlo de mí, pero su fuerza es mucho mayor que la mía. Luego de unos cuantos segundos me suelta, comienzo a toser desesperadamente mientras intento llenar mis pulmones de oxígeno, mis ojos se llenan de lágrimas… a él no le va a importar maltratarme una y otra vez, nunca le va a importar.
Las veces que me ha dicho que me ama, las veces que me ha dicho que va a cambiar… todo ha sido para mantenerme ahí, para crear ese monstruo que no me deja salir de aquí.
—Última vez que te quedas fuera de mi casa —él golpea suavemente con su mano mi mejilla— de nuestra casa la última vez que lo haces, y esto tiene su consecuencia.
—Más consecuencia que esto, no lo creo —dije colocando las manos en mi cuello.
—Mi amor la consecuencia no es para ti, la consecuencia es para él, para que entiendas que no debes acostarte con él, ni con nadi