Derek al escuchar el alboroto bajó hasta la planta baja de su casa, su paz estaba siendo interrumpida por sus amigos, Roberto bajó y vio el desastre que había afuera, miró a su hijo con ganas de matarlo, Beatriz estaba en casa de reposo, él quería paz mental y tranquilidad para su esposa, pero este inmaduro jamás pensaba en su familia, él no había ido a saber de su madre, estaba más que seguro que ni cuenta se dio, de que ella estuvo enferma y se enteraron del embarazo.

—Te doy cinco minutos para que arregles este desastre, te lo dije muy bien muchacho, no quiero mas desastres en casa, tu madre está enferma y no merece este tipo de espectáculos—

—Padre te juro que no se que sucede aquí, prometo solucionarlo yo mismo, dame una oportunidad por favor—

—Si tu madre se llega a enterar, serás hombre muerto, te enviare al extranjero sin vuelta alguna y te casaras con Paola, quieras o no—

Derek sabía muy bien que su padre no estaba jugando, él cumplirá con su amenaza, así que él salió corrien