La mirada de Morgan parecía sugerir algo, pero en este momento, Cira se sentía mareada e incómoda. Su ánimo estaba pesado, y no tenía la disposición de profundizar en el asunto.
Él no quería despedir a Emilia, así que no tenían mucho que discutir al respecto.
A lo sumo, Cira podía sugerir indirectamente a Marcelo que le recordara a su hermana que no invirtiera demasiado emocionalmente en Morgan.
Pero Morgan le dijo sin mucho interés: —Eres la jefa de la secretaría, ellas están bajo tu mando. Si sientes que no son apropiadas y quieres que se vayan, simplemente hazlo. No necesitas preguntarme por estas pequeñeces.
¿Eso significaba que él estaba de acuerdo en despedir a Emilia?
Morgan siempre era así, realmente hacía difícil que la gente entender lo que estaba pensando.
Emilia tenía razón, este tipo de hombre era muy tentador, y la gente quería ver cómo sería él después de entregar su corazón.
Pero Cira ya lo había intentado y fracasado completamente. Ahora no se atrevía a buscar el amor