hombros tratando de cubrir los nervios que me provocaban una nueva crisis de ansiedad. Mientras iba en el carro tratando de poner atención a las cosas que me decía Sandra, una parte de mi viajaba al pasado...
VERANO PASADO
—¡Vamos Candice! —Me grita con un poco de exasperación Edwin al tiempo que toca la puerta del baño—. ¡Estoy seguro que serás la envidia de la fiesta!
Me miro en el espejo y observo con frustración mi reflejo, recorro con ojos curiosos mi cuerpo, tenía buenas curvas pero no era de las chicas que le gustaba enseñar demasiada piel, eso sin contar que era algo delgada, demasiado sería la palabra correcta. Suelto un enorme suspiro sabiendo que estoy a merced de to