24. Reencuentro con el pasado
El aire de Ciudad Vasett olía a pintura fresca y a humo de grafiti. Skyler caminaba entre lienzos vibrantes y esculturas improvisadas con metal reciclado, rodeada de jóvenes artistas que la miraban como si fuese una mecenas salida de las páginas de un sueño.
Le hacía sentirse algo incómoda, tener a un público tan joven mirándolo con admiración no era algo a lo que estuviera preparada. ¿Y si hacía algo mal?
—Tu obra tiene ira y espía en ella, pero también hay esperanza y anhelo —comentó a un muchacho de cabello rizado, mientras analizaba un lienzo que mostraba la silueta de una mujer encadenada rompiendo los eslabones—. Esa dualidad es lo que impacta. Quiero que sea parte de la exhibición.
El artista apenas podía articular palabras, con los ojos brillando de emoción. Skyler pasó al siguiente cuadro: un mural fragmentado en trozos de madera, que mostraba la ciudad bajo la sombra de una figura femenina gigantesca.
—Y este también. —Se giró hacia Becca—. Quiero que lo coloquen en la en