cap. 53

destinado al jeque

Hamad

"¡Ahí tienes, repugnante demonio, muéstrame lo odioso que eres más que nada!"

Estoy encima de ella, sosteniéndola con mi cuerpo, pero Haila sigue insistiendo en desafiarme y seguir profiriendo tantos insultos, sin que yo sepa el motivo del ataque, ya que estoy al límite y no lo sé. quiero hacer cualquier mierda, solo la solté, y me fui, dejándola de una manera ruda y ya me dirigí hacia la puerta para irme, pero definitivamente no soy un cobarde, así que decidí regresar, volviéndome sobre mis pies, y dirigiéndome directamente hacia ella otra vez, y ahora tomándola por la barbilla y manteniéndola cautiva allí en la cama, y ​​exigiendo una explicación, porque quiero entender por qué se asustó así, y qué hice mal, ya que estoy siendo un esposo fiel, amoroso y servil, pero a ella ni le importó y solo tiró mi gesto cariñoso al aire y todo se fue al suelo.

- Mira, escucha Haila, solo volví porque no creo que lo que estás haciendo sea justo, porque no tengo id