Naiara
Me levanto como en medio de un sueño fantástico. Creo que nunca había experimentado lo que era tanta felicidad. Cuando estaba en mi habitación, en el templo e imaginaba lo que habría en el mundo exterior... creo que pensaba en esto, en esta sensación de completo triunfo, de sentirme fuerte y satisfecha. La sensación de que uno ha obtenido lo que tanto deseaba.
Me levantaba en mi habitación tan cómoda que por un momento me siento perdida. Estoy en mi camisón, pero él no está por ningún lado y mi cuerpo ya extraña sus brazos, su olor. Me volteo y encuentro una pequeña nota. Automáticamente, veo la fina caligrafía, y sé que es de él. Tantos años esperando sus mensajes, sus palabras siempre tan maravillosas.
Mi preciosa princesa
Ayer fui el hombre más afortunado de toda el mundo. Nunca pude imaginar un destino tan fantástico y creo que me tomo el atrevimiento de pensar que está escrito la estrella más brillante. Solo a la diosa luna se lo hubiese ocurrido una idea tan fantás