Capítulo XIII...
Aranza se siente segura entre los brazos de Sebastián, y ella corresponde aquel abrazo.
-Sebastián…¿tú crees?
-Ese hombre no es bueno, Aranza…no tiene buenas intenciones
-Pero es mi amigo…desde niños…
-Hasta los amigos más cercanos pueden ser tus peores enemigos, ten en cuenta mis palabras, esposa…Miguel Fernández de Córdova es un peligro para ti y nuestra hija
Aranza se queda pensando en aquellas palabras, mientras esconde su carita entre el pecho de Sebastián.
-¿Deseas algo?
Aranza niega con su cabecita – está bien…
-Sebastián
-Dime esposa…
-Me gusta el nombre de Cristina…
- ¿Te parece Alma Cristina?
La joven asienta – tus deseos son órdenes esposa – besando aquella cabecita
-“Awww, que dulce marqués”
-Cierra la boca – dando una sonrisa – mejor dime que se te ha ocurrido algo
-“Nada marqués…es que debe ser algo a prueba de tontos…”
-Lo sé…tengo que demostrar a Aranza que ese hombre no quiere nada bueno con ella, y de paso deshacerme de Lucía
-“Marqués, ten presente…para Aranza Migue