―¿La princesa Alyssa? ―Pregunta Samantha, mientras escucha de los labios de Elyan que Alyssa ha regresado a Elyndor. Ella después lo golpea con un cojín al escuchar que él la tiene prisionera. ―¿Porqué encarcelas a tu propia hermana? ¿Estás loco? ―Le pregunta molesta Samantha.
Lirien, Elara y Frodo observan la escena, mientras están tomando un té en la mesita de la biblioteca, decidiendo los tres no intervenir.
Elyan suspira y se pasa una mano por el cabello, visiblemente agotado por la situación.
―No estoy loco, Samantha. Lo hago por su seguridad y por la seguridad de Kycatrea. Mi padre la está buscando y no puedo arriesgarme a que la encuentre aquí. Además, como te dije antes, ella también es una usuaria de la magia y cada vez que abre un portal alerta al Concejo de Magos de mi padre.
―Entiendo tu preocupación, Elyan, pero no puedes tener a tu hermana prisionera. Debes buscar una solución para que ella esté segura sin tener que privarla de su libertad. ―Le aconseja Lirien, quie