Salgo de las instalaciones, no puedo creer que por fin este inscrita en la universidad, por fin podre poner en marcha mis estudios.

Con una sonrisa sigo caminando hasta que siento mi celular vibrar dentro de mi bolso por lo tanto enseguida lo saco y veo que es Edan quien llama.

En llamada…

— ¿Noelia? ¿Dónde estás? —él parece estar un poco desesperado.

Con el ceño fruncido me dispongo a contestar esa pregunta.

—Estoy de camino a un parque, tuve cosas que hacer.

—No me vendría mal que me avisaras por lo menos.

Es ahí cuando suspiro y solo detengo mis pasos.

—Lo siento si no avise es solo que no quería otra discusión por eso es que me salí temprano. En fin, volveré más tarde hasta luego—termino de decir para luego colgar esa llamada.

Cuando hago eso veo como hay varias llamadas perdidas de Edan vaya ahora entiendo su desesperación, pero como dije no quería volver a discutir con él.

Vuelvo a suspirar a la vez que guardo mi celular. Tal y como dije estoy de camino a un parque el cual está