Me encontraba en un estado absoluto de shock, las imágenes se repetían en mi cabeza una y otra vez, cuando Liv se dio cuenta de que estaba ahí corrió a ayudarme. Ella intentaba detener el sangrado de mi ceja. Estuve llorando contra el pecho de Camilo varios minutos, las personas que estaban ahí decidieron dejarnos a solas.

-¿Qué fue lo que pasó cariño?- Preguntó Camilo en un susurro tomando mi rostro entre sus manos.

-Y...Yo, te juro que no fue mi culpa, no lo provoqué ni...- Intenté aclarar rápido antes de que pudiera pensar algo que no era.

-Shh, no tienes que aclarar nada, esto es todo, menos tu culpa, jamás llegues a pensarlo-

Yo solo seguí abrazada a Camilo, no quería soltarlo, me sentía segura en sus brazos, sabía que estando con él nada me podía pasar. Después de un rato, estaba un poco más tranquila, sentí como Camilo levantaba con cuidado mi barbilla para verme a los ojos.

-Amor, perdóname- Yo lo veía confusa, sin entender de que hablaba –No estuve ahí para ayudarte, si hubie