Mackeyla Stelite.
Nos encontrábamos ahora en una discoteca. Las chicas bailaban en la pista con los chicos mientras yo tomaba un trago extraño que habían traído.
Mire a Nicolás, el cual miraba su celular con el ceño fruncido.
Me preguntaba cuando dejaría ese ceño fruncido para pasarla bien, llevaba horas en esa situación.
— Dime por favor que no estás casado o que tienes novia. — Llamo su atención. — No puedo ni quiero ser la otra.
Alza la vista del teléfono y me observa con una sonrisa divertida.
— Soy mucho como para tener alguna pareja. — Suelta y ruedo los ojos.
— Estúpido Británico. — Niego antes de acercarme más a él. — ¿Que te tiene tan distraído?.
— No encuentro un anillo de bodas digno de ti. — Dice suspirando con pesar.
— Idiota. — Sonríen como tonto. — En serio ¿Que pasa?.
— Es trabajo, no se si lo sepas pero la gente hace eso. — Le veo mal. — Es para poder vivir. De ahí sale del dinero ¿Sabes que es el dinero?.
— A veces me pregunto como te tolero.— Murmuró tomando mi t