Capítulo 7: ¿Sueño o Realidad?

Cristóbal Manckenzie

                                                                          Un sueño es un deseo que hace tu corazón.

Hoy es viernes y el cuerpo lo sabe. La relación de Bárbara y yo cada vez está peor, no sé, si se puede llamar relación porque no somos amigos ni mucho menos compañero ¡Esa mujer es difícil! Y eso es lo que me atrae de ella no es la típica mujer fácil.

No iré a la empresa de Bárbara. Tengo muchas cosas que hacer una de ellas es hablar con mi hermano para que se haga cargo de la empresa por un tiempo.

Carlos entra a mi oficina como siempre sin tocar, ya se me hizo costumbre.

--¿Para qué soy bueno?-pregunta desde que entra.

--Y si sólo te llame para verte-respondo.

--Entonces, eso no sería bueno-dice con una sonrisa-. ¿Qué necesitas?-vuelve y pregunta.

--Quiero que te encargues de la empresa por unas semanas-revele-. Solo serán unas cuantas-contesté.

--¿Cuál es el motivo?-pregunta.

--Llegue a la conclusión de que necesito vacaciones y me la merezco-miento.

--Eres muy bueno para mentir pero conmigo no funciona-confiesa-. Pero está bien, acepto-responde.

--Okey. Voy estar viniendo como quiera a supervisar todo-expresé.

--Bien, ¿Puedo saber qué tramas?-me pregunta.

--¿De qué hablas? Ya te dije necesito descansar-respondo.

--Carolina me contó todo, no te preocupes. Yo estuviera así o peor porque está muy hermosa la chica ¿Dónde la conociste?-pregunta.

--En una gala para recaudar fondos-expuse-. Ahora soy su socio mayoritario-digo con una sonrisa.

--¡Enserio! ¿Cómo lo lograste? Porque según Carolina, la mujer tiene un carácter fuerte-reveló haciendo una mueca con su boca.

--Para mí no hay nada imposible-respondo-. Tengo que ir a la empresa, hacer todo lo que un socio mayoritario debe de hacer y unas cuantas cosas más-le expliqué.

--Pero aquí eres el dueño, ahora vas a pasar a otra empresa donde simplemente eres socio-expresó-. Esa mujer te ha cambiado-dice.

--Se llama Bárbara y no, no me ha cambiado. Siento una atracción sexual y creo que ella siente lo mismo-confieso.

--Puedes conseguir a la mujer que quieras ¿Por qué ella?-pregunta.

--Es diferente a las demás-murmuré.

--Ya es hora de que formes una familia, que tomes las cosas en serio hermano-me explica-. Si crees que es la mujer indicada juégate todo por ella, no te equivoques, tienes una sola jugada, tienes que colocarla en el lugar correcto-indicó.

--Eso voy hacer-susurré con una sonrisa.

--Bueno, nos vemos mañana hermano-nos despedimos con un apretón de manos y un abrazo.

(...)

¡Estoy tan agotado! Que lo primero que hago es acostarme en mi cama, necesito dormir. Hoy fue un día muy agitado tenía que preparar todo para que Carlos entendiera cómo funciona la empresa y cómo poco a poco avanza.

He tenido que controlarme para no llamar a Bárbara, todos los días tengo que pensar en ella y esos sueños que de alguna manera hacen que mi amigo se levante todos los días al amanecer.

La he tenido en todos los lugares posible cómo gime mi nombre en cada estocada, el sabor de sus labios, que al despertar ella está ahí abrazándome. Pero dicen que los sueños se cumplen y este es el que yo más anhelo.

Ella besa mi cuello constantemente, sube por mi barbilla deja pequeños besos y al final besa mis labios. Mi lengua recorre su labio de lado a lado quien prueba un helado. Mis labios se adueñan de los suyos los saboree, los acaricie hasta que escuché un jadeo de su parte. En un instante me aleje un poco para mirarla a los ojos y sonreír, quería saber si era cierto que ella estaba aquí conmigo, en mi cama.

Seguimos con nuestro beso, nuestras lenguas juegan entre sí, se acarician mutuamente mientras mis manos se pierden por su nuca y su cabello donde mis manos deshacen su espalda a cada rose. Me recorre una sensación de cosquilleo que nunca lo había sentido, mi mente se nubla dónde lo único que sería capaz de percibir el calor de su cuerpo contra el mío.

Mis manos van hacia sus pechos, que le dan varios pasajes por encima de la tela de seda blanca. La coloco bajo mi cuerpo y le quitó la tela de seda. Sus pechos quedan a mi vista, de sólo verlos la boca se me hace agua, me lanzo por ellos chupo, los acaricio, muerdo sus pezones que se endurecen por mi tacto.

De su boca salen pequeños jadeos y movimientos que me avisan que está disfrutando de mis caricias. Bajo por su abdomen depósito varios besos hasta llegar a su feminidad. Separó sus labios vaginales para llegar a su punto de placer, succiono y muerdo ocasionando que gima mi nombre. Mi lengua va hacia arriba y abajo constantemente saboreando como si de un caramelo se tratase. Hasta que se estremece pero escucho algo que me hace detener por completo.

--¡Detente Cristóbal! ¡Detente!-escucho un ruido en mi habitación.

Abro los ojos enseguida y me encuentro con la loca de mi prima riéndose cómo ella lo sabe hacer.

--¿¡Qué demonio haces aquí!?-le pregunto frotando mis ojos varias veces-. ¿Cómo entraste?-pregunté.

--¿Tenías un sueño o era realidad?-pregunta-. Tu respiración estaba agitada, estás sudando-reveló.

--¡Te hice una pregunta! No me contestes con otra-respondo.

--Es obvio antes de irme con mi novio vivía aquí, volví de nuevo ese estúpido me engaño con una fruta-informa-. Pero tú sí que la estabas pasando bien-dice a volumen bajo.

--No vuelvas a molestar-digo con voz amenazadora-. ¿Cómo que te engaño con una fruta?-pregunto confundido.

--Dijo que ella le da más placer que yo ¡Me engaño con una sandía llamada Verónica! ¿Lo puedes creer?-pregunta.

--Ese hombre sí que está loco-murmuré.

--Lo encontré en pleno acto sexual-responde con una sonrisa-. Al principio me parecía gracioso pero ahora viendo la gravedad del caso yo soy la cornuda-expresó cruzando sus brazos.

--Ya sabes dónde está tu habitación, ahora sal de la mía-respondo-. Ahora-le indicó.

--Está bien, para que sigas con tu sueño húmedo entre Bárbara y tú-informa.

Ella sale de mi habitación, vuelvo y me acuesto en la cama paso mis manos por mi cabello ¡Esa mujer me está volviendo loco!

Parecía tan real pero al final sólo fue un sueño.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo