26. Dia Uno En Ibiza
[MATT]
Cinco días después
Su mano me sujeta fuertemente mientras que el avión despega y eso me deja saber que no soy el único al que le pone nervioso los aviones. —¿Te da miedo volar?— Le pregunto al oído y ella me sonríe.
—No lo sé, pero sujetar tu mano me hace sentir más segura. — Responde haciéndome reír.
—Esa es una buena razón. A mí me encanta sujetar tu mano, me hace sentir el hombre más afortunado del mundo. — Le comento y dejo un tierno beso en la comisura de sus labios.
[...]
Después de un vuelo relativamente corto para lo que estoy acostumbrado y uno donde nos hemos seguido conociendo en medio de una charla muy amena, recogemos el auto que he rentado y vamos al hotel para dejar nuestras cosas y cambiarnos para ir al evento que tenemos planeado. Si bien muero por quedarme con ella comiéndonos a besos, sé que también debemos ir con calma, y eso es una de las cosas que más me enamoran de ella. Es esa mezcla entre la mujer segura que está detrás de aquella barra, y la niña que