El timbre resuena en el aula, todos se levantan de prisa y salen del salón apresurados. Yo en cambio, espero a que se vayan la mayoría y me acerco a la profesora dispuesta a entregarle el informe que como siempre, suelo adelantar par salir de ello.
—¿Ya lo terminaste? —asiento con la cabeza.—Mckellen no podrá asistir hoy a su clase, me dijo que le avisara a usted para que estuviera al tanto —informo entregándole la carpeta azul de Jackson.—Oh, entiendo, gracias Ava.Sonrío y me despido de ella.Estando en los pasillos, diviso a Sam guardados sus cosas en el casillero, así que me encamino hacia donde está.—Hola —voltea a mi dirección y sonríe.—¡Ava! —me envuelve en un abrazo.—¿Por qué no habías asistido a clases?Pregunto al separarme de ella.—Oh, si supieras —arrugo el entrecejo—. Tuve que quedarme a cuidar a mis hermanos, y le pedí permiso al director. Aceptó porque prometí hacerle el