Capítulo 5.

Annabelle: 

Sin poder controlarlo me transforme en coneja, controle mi respiración y me volví a transformar en humana. No debí haber hecho eso. 

—Eres una coneja —el Alfa enorme me miraba con curiosidad. 

—Y una muy hermosa —el otro Alfa me miraba de la misma manera. 

—Yo.. yo ¿podría quedarme aquí? Hasta que mi herida sane y pueda irme.. 

Ellos dos me miraron con tristeza pero ¿por que? 

Por alguna razón ellos me hacen sentir extraña, no puedo olerlos pero, tengo la sensación  de estar cerca de ellos pero ¿por que? No podría acercarme, soy una Omega y jamás podría acerarme o tocar a alguien superior a mi. 

—Dime algo Annabelle ¿sabes lo que es Mate? —asenti— Te dijimos que ambos lo somos. 

—Si, pero me parece algo imposible de creer —murmure— ¿Es posible que sea mate de los dos?

—Así es, se que esto te tomará por sorpresa, a nosotros nos paso igual, pero tu eres nuestra Mate —habló Alfa Viktor. 

Eso es imposible, no podría ser Mate de ambos Alfas, ¿como es eso posible? Es algo que para mi es muy difícil de creer, no, no hay posibilidad. 

—M-Mate de los dos —asintieron— ¿es eso posible? —los miré a ambos. 

—Al parecer lo es, creo que la Diosa Luna tiene un propósito para los tres —Ilian sonrió.

—Ustedes no podrían estar conmigo —dije en voz baja—, soy una Omega de bajo rango, además de ser una coneja, no podría, me odiarían como lo ha hecho todo el mundo. 

—¿Por que te odiaríamos? Eres nuestra mate, jamás lo haríamos —Viktor se sentó en la camilla.

Sin verlo venir me transforme de nuevo en coneja y me aleje de el, en sus ojos vi su tristeza al alejarme de el. Pero tengo que mantenerme así, tengo que protegerme de ambos. 

—Dejémosla sola por un momento Viktor, debemos averiguar algunas cosas, vamos. 

Y sin más salieron de la habitación dejándome sola. 

Ilian: 

Ella cree que por ser Omega no podría tenernos como mates, seguramente eso es lo que le enseñaron en su manada, que un Omega no es digno de nada o nadie. 

Viktor está algo triste y se que es porque ella se alejó de el, el rechazo de tu mate es muy doloroso para nosotros, es como si un puñal fuese clavado en nuestro pecho. 

Fuimos hasta mi casa y llame a Mike por el Link, media hora después llegó, se que el tiene un trabajo algo complicado ya que es médico y tiene que atender a los enfermos y heridos de la manada. 

—Aquí estoy ¿Qué deseas? 

—Llama a la pareja de Omegas Green, ellos son conejos, necesito hacerles unas preguntas —el asintió y salió. 

—Ilian ¿crees que llamarlos serviría de algo? —preguntó Viktor. 

—Eso espero, yo no sé qué hacer en este caso y tu tampoco, al menos con los Green sabremos que hacer, ellos son Omegas también, así que cualquier información que tengan será de ayuda. 

El solo asintió, minutos después llegaron los Green, una pareja de conejos Omegas, ellos trabajan en el área de cultivos para los alimentos de la manada, son buenos trabajadores. 

—Alfa Viktor, Alfa Ilian ¿en que podemos servirle? —preguntó el señor Green.

—Antes de hacerles las preguntas, siéntense por favor —señale las sillas—, queremos contar también con su total discreción con esto. 

—Claro que si Alfa, lo que usted pida —dijo la señora Green. 

Le conté todo a los señores Green desde que ella llegó aquí hasta ahora, sin dejar ningún detalle de lado. Necesitábamos respuestas ahora para saber que hacer y que no con respecto a ella. 

—Entonces la señorita Annabelle es la mate de ambos —asentimos— la Diosa Luna tiene algo preparado para las manadas. 

—Así es, lo que queremos saber es sobre la coneja, en su manada le enseñaron cosas que no se deben y no sabemos como actuar —dijo Viktor.

—Bueno Alfas, por lo general no en todas las manadas los Omegas no somos tratados de la mejor forma, nos humillan, nos esclavizan incluso a algunos lo usan como.. Trabajadores sexuales —dijo apenado. 

—En el caso de las conejas —habló la señora—, tenemos la mala fama de no ser tan fieles, ya que solemos ser insaciables y no podemos tener una pareja por tanto tiempo, de ahí viene el rechazo por parte de nuestras parejas, muchas conejas se quedan solas o solo las usan para sexo, a veces las maltratan porque llegan a ser muy sumisas y se aprovechan de eso. 

Por eso es que ella reaccionó de esa manera.. Ahora todo comienza a tener sentido. 

—Pero no todas son así Alfas —el señor Green sonrió—, mi esposa y yo llevamos muchos años juntos, el amor pudo más que todos aquellos comentarios y prejuicios que tienen hacia ellas. 

—Así es Alfas, deben tener paciencia, si a la Luna la trataron de esa forma, costará que se acostumbre a su nueva vida, ambos deben darle mucho amor y atención. 

—Lo haremos, ya es hora de que la manada anuncie la llegada de su Luna —sonreí. 

—Yo tengo una duda —habló Viktor— ¿Cuántas crías podrá tener? ¿Los tiene en su forma? 

La señora Green rio leve —Ustedes son lobos y ella coneja, si fuesen de la misma especie, ella tendría conejos o lobos, ustedes son Alfas de sangre pura, lo más probable es que ella los tenga estando en su forma humana, lo más seguro es que tenga dos o tres crías. 

—Gracias por la ayuda señores Green, si necesitamos preguntar algo mas, los llamaremos. 

—Si Alfa, con permiso. 

Ambos salieron del despacho, al menos pudimos despejar algunas dudas. 

—Tenemos que preparar todo para empezar a unir nuestras manadas en una sola —asentí a lo que Viktor dijo—, pero antes hay que darle tiempo a ella para que lo asimile. 

—Estoy de acuerdo, ¿Vas a regresar a tu manada? —asintió. 

—Tengo que darle la noticia a mi Beta y.. —soltó un suspiro—, terminar lo que tengo con aquella loba, ya encontré a mi mate y no quiero tocar a ninguna mujer que no sea mi mate. 

—Espero que no se te complique —negué varias veces—, sabes como son las lobas. 

—Yo espero lo mismo ¿crees que nos acepte? —preguntó refiriéndose a Annabelle. 

—Para ser honesto, no lo se, pero espero que si, ya la encontré y no pienso dejarla ir. 

Viktor salió del despacho para irse a su manada, yo por mi parte fui de nuevo al hospital a verla, entre de nuevo a la habitación y ella estaba sentada sobre la cama peinando con los dedos su cabello. Aun no creía que ella era mi mate, que estaba aquí conmigo. 

—Hola Annabelle —sonreí. 

—Alfa Ilian —sonrió leve. 

—¿Cómo te sientes? —me quedé lejos de ella para no incomodarla— ¿Te duele?

—La herida ya no duele tanto, gracias por preocuparse. 

—Lo hago porque eres mi mate, es mi deber cuidarte.

—¿De verdad soy su mate? E-Es que me resulta difícil de digerir. 

—Así es, —asentí—,eres mi mate y la del Alfa Viktor, se que es difícil de creer pero, así lo quiso la Diosa Luna. 

—¿Podría acercarse un poco? —preguntó tímida. 

Me sorprendió un poco lo que pidió pero de una vez le hice caso, sin asustarla me acerque a ella y me senté a su lado, ella se acercó mas a mi, pude sentir más de cerca su olor, ella colocó sus manos en mis mejillas y me miró fijamente con sus hermosos ojos azules. 

—Es hermoso Alpha —ella sonrió—, puedo escuchar los latidos de su corazón. 

Y no mentía, mi corazón estaba a punto de salirse al tenerla así de cerca. 

¡Quiero salir y marcarla! —mi lobo sonaba desesperado. 

—Tu.. tu eres hermosa Annabelle —solté un fuerte carraspeo. 

—Dígame Belle, siento que es mas sencillo  —sonrió. 

Belle, joder que nombre tan sexy —decía mi lobo, tengo que controlarlo. 

Se separó de mi y se sentó de nuevo en la cama. 

—¿Sabe Alpha? De donde vengo he sido tratada como inferior, desde que tengo uso de razón las personas murmuraban cosas sobre mi y de que jamás sería la compañera de alguien, yo había perdido toda las esperanzas sobre encontrar a mi pareja, la verdad... Tengo miedo de que me rechacen, nadie me ha querido jamás por el simple hecho de ser coneja —había tristeza en su voz—, por eso me cuesta mucho creer esto que esta pasando. 

Se volvió a transformar en coneja, pero esta vez sus orejas estaban abajo, caminó lentamente hasta mi y se acurruco a mi lado. 

Puedo oler y sentir su tristeza —había dolor en la voz de Alec—

te juro por la Diosa Luna que

la voy a proteger de todos. 

Y yo haré lo mismo, no dejaré que nadie más la trate como inferior. 

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