capitulo

Su pequeño cuerpo encaja perfectamente en mis brazos, la atraigo más cerca de mí, envolviéndola con mis brazos. Ella jadea, mis labios se mueven hacia la parte superior de su mejilla, a su sien, a su frente. No quiero dejar de besarla, de abrazarla. Nunca me he sentido así: desesperado, hambriento y, al mismo tiempo, tan satisfecho.

Desliza sus manos hasta mi cuello y deja caer su frente sobre mi pecho desnudo. Bajo la nariz hasta la parte superior de su cabeza y respiro.

—Taron. —Su voz suave suena tan desconcertada como yo me siento.

¿Cómo nos está pasando esto?

¿Le ha pasado esto a alguien antes?

¿Es posible? Se siente tan bien, tan especial.

—¿Qué estás haciendo? —Levanta la cabeza y sus ojos dorados son cálidos.

La pregunta me hace sonreír.

—Algo que he querido hacer durante dos días. Ella parpadea mientras sus mejillas se sonrojan.

—Me preguntaba por qué no lo hice cuando me pillaste en la cocina. —Se le arrugan la nariz y me mira de reojo—. ¿No es eso lo que hacen las damas cua
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App