Al día siguiente me levantó, tomó la toalla y voy a darme una ducha, minutos después ya estaba lista para ir al instituto, salgo de la habitación para bajar las escaleras y dirigirme en el comedor para el desayuno.
Entró en ella, para mi sorpresa estoy sentada sola — ¡Al fin desayunare tranquila! — Me digo a mi misma con una leve sonrisa.
Pero mi sonrisa se borra al momento de ver a Iam entrar y sentarse « ¡Genial! » Me decía a mí misma.
— ¡Buenos días! — Vocifera cordialmente mientras me observa.
— ¡Buenos días! — Respondo a su cortesía de la misma manera.
Hoy no podré ir contigo al instituto, pero te llevará uno de mis guardias personal, él te llevará y te traerá de vuelta.
— ¡Está bien! — Respondo un poc