Christian es un tipo despreciable, primero hizo que Carmen se sacrificara por él y luego hirió profundamente a Lucía.

—Un hombre tan poco confiable como él no es el adecuado para Carmen, no puede darle felicidad—dijo Iñigo, a pesar de la incomodidad.

—¿Crees que solo tú puedes hacer feliz a Carmen? Conoces muy bien qué tipo de hombre eres—Andrea miró con desdén a Iñigo.

Ella sabía que Iñigo y Domingo eran conocidos playboys en Ciudad Baja, con una reputación cada vez peor. Ahora Iñigo se atrevía a decir que Christian no era confiable, ¡no entendía cómo podía decir eso!

Al ser confrontado por su hermana, Iñigo se sintió un poco avergonzado. —Solía ser imprudente en mi juventud, pero esta vez, mis sentimientos por Carmen son genuinos.

—No tengo tiempo para tus locuras—Andrea hizo una mueca y se dio la vuelta, ignorando a Iñigo.

Al ver que Andrea no aceptaba, Iñigo se sintió decepcionado. Sin embargo, antes de que pudiera reaccionar, Andrea se detuvo y de repente regresó.

—Hermano, de rep