Los días tranquilos y alegres pasaron rápido.
Flint había comenzado a aprender a hablar, entonces Sylvia comenzó a enseñarle más y más palabras. Si bien la vida que llevaban era un poco sencilla, no era precisamente aburrida.
Odell llegaba a casa del trabajo a tiempo casi todos los días. Había días en los que tenía que trabajar hasta altas horas de la noche, pero afortunadamente no era frecuente.
Isabel siguió estando de mal humor y Flint la molestó durante los días siguientes. El mal humor finalmente terminó cuando Flint finalmente la llamó “hermana” por primera vez y puso fin a todo el episodio desagradable.
Pasaron dos semanas en un pestañeo.
Como era sábado, ni Isabel ni Liam tenían que ir a la escuela y Odell no tenía que trabajar los fines de semana.
Isabel quería ir al parque de diversiones, entonces Sylvia y Odell los invitaron a pasar el día.
Incluso cuando el cielo se oscureció, la niña se negó a irse a casa y en cambio quiso ir al cine.
Odell miró a Flint, qu