– ¿Cuántos años tienen nuestros hijos?
– Seis y tres
– ¿Fui a la universidad?
– No, nos casamos muy jóvenes y aunque habíamos planeado mudarnos a la ciudad, cuando quedaste embarazada terminamos por quedarnos aquí. El campo es el mejor lugar para los niños.
– ¿Me culpas por perder al bebe? – Erick se sorprendió por mi pregunta, pues tardo un largo rato en responder, parecía haberse congelado a mi lado. Entonces cuando voltea a él solo pudo preguntar.
– ¿Cómo...?
– Los escuche hablando en la cocina – entonces simplemente evadió la pregunta, pero para mí fue una rotunda afirmación.
– Mañana iremos a la ciudad, tenemos hora con un neurólogo es uno de los mejores en el país.
– ¿Qué hay de los niños?
– Tu madre cuidara de ellos mientras tanto, estaremos un par de días en la ciudad
– No creo que sea lo mejor, tal vez en un par de días recupere la memoria estando en casa.
– No, ni hablar no esperaremos para ir al médico, tenemos que ir ya mismo.
*****
Un pitido anunc