—¿Tú? —mi garganta se seca.
Si ella lo sabe todo ¿Cómo es que no está despotricando y golpeándome en este instante?
—No estoy enojada contigo Danielle —dice calmadamente.
—Pero supe lo de Serena y Ryan y no te conté nada
—No era tu asunto —ella me regala una media sonrisa—. ¿Puedes decirme ahora que te ocurre?
Mire a Nathan y de vuelta a ella varias veces, porque no sabía que decir. Nathan se levantó de su asiento en la barra y camino hacia mí.
—Supongo que debo irme —beso mi cien—. ¿Estarás bien? —asiento.
—Gracias por todo, de nuevo
Acarició mi mejilla y dejó su mano en mi cuello mientras besaba mi frente.
—Llámame si necesitas algo —susurro.
—De acuerdo
Él se retiró a rega&n