PUNTO DE VISTA DE ETHAN
Partimos a Luna Amatista: un largo viaje de unas diez horas. Ahora podía comprender porque Susie decía que vivíamos en medio de la nada. Fueron alrededor de siete horas solo de atravesar montañas, ya llevaba las piernas y las nalgas dormidas de tanto apretar el acelerador.
No tenía ninguna idea de dónde estaban exactamente las “manadas costeras”, francamente, jamás había salido de nuestra manada; por esta razón, Alfa Jacob me indicaba el camino. El resto de la ruta, mientras no estaba indicando si doblar hacia derecha o izquierda, estaba con la vista atrás, comiéndose a mi hermana, por esta razón, preferí subir el vidrio polarizado que separaba los asientos traseros, con el mío. Los ruiditos extraños que emitían, me inquietaban; envidiaba un poco su amor, pero no podía dejar de pensar que se trataba de mi hermana.
- Unos metros más adelante debes doblar a la izquierda Ethan… allí encontrarás la entrada de la manada Luna Amatista.
Mi corazón se apretó producto