La observo acostada a mi lado con su respiración agitada y con su mirada fija en la mía, ella me sonríe y yo solo puedo corresponder a su gesto. Estiro mi mano para atraerla hacia mí, y ella no pone ninguna resistencia, por el contrario, coloca su brazo sobre mi pecho y me abraza fuertemente.
— ¿Te encuentras bien cariño? — Le pregunto besando su frente.