La atención de Nicole estaba enfocada en la situación que tenía enfrente. Esos rufianes también estaban bien preparados. Estaban luchando despiadadamente contra sus guardaespaldas, pero ninguno se atrevía a atacar a Nicole.
Por el rabillo del ojo, Nicole notó de repente que Hector Leach se había levantado con la intención de escabullirse.
Ella frunció las cejas y oprimió los labios. Hector era la clave para someter a esta gente, así que no podía dejarlo escapar.
Nicole estaba a punto de acercarse y arrastrarlo de vuelta, cuando de repente escuchó a Logan gritar con pánico: “¡Presidenta! ¡Tenga cuidado!”.
Ella se quedó perpleja, de repente sintió que un escalofrío le viajaba por la espalda. Inconscientemente se puso tensa y se dio cuenta de que alguien estaba a punto de atacarla por detrás.
También era demasiado tarde para esquivarlo. Era inevitable.
En ese momento, Hector se lanzó de repente hacia ella. Su cuerpo parecía incontrolable, lleno de sorpresa y miedo.
Su velocidad era