Al ver a Lance bajar tanto su postura y ser tan sincero con ella, Yvette lo perdonó sin querer.

“Bien, pero eso es eso y esto es esto. ¡Mi salario y trato no pueden ser peores!”.

Yvette frunció los labios. ¡Ella no podía trabajar de gratis!

Lance asintió con seriedad.

"Tienes razón. El salario básico anual de Hans es de unos 3 millones y con los otros bonos sumados, dan un total de 5 millones aproximadamente. Tu valor no puede ser menor que el de él. Te daré 10 millones y se pueden negociar otros bonos. ¿Cómo suena eso?".

Yvette lo miró en estado de conmoción, como si estuviera mirando a un idiota.

¿El salario anual de Han era el mismo que el de ella?

¡El salario anual que le ofrecía su madre era de menos de tres millones!

A Yvette no le faltaba dinero y su salario era solo una gota en el océano.

Si no fuera por la tarjeta negra de su madre, ¿cómo podría Yvette mantener su estilo de vida?

Un salario anual de 10 millones. Yvette sentía que este era el pináculo del mundo de los