Cap. 37 Amargas verdades
Y cuando es tan amarga, solo queda tomarla de a poquito corazón.

Ella rio amargamente y se llevó asqueada las manos al rostro de lo que él decía:

—Ahora solo te queda eso, hermano, cantar y señalar a los culpables.

Fred estaba molesto y entonces le comentó:

—Me echas la culpa de todo y no sabes el resto…

—Freda es tu hija.

—¡Exijo una prueba de paternidad!

Lily quería matarlo a golpes y entonces le dijo:

—¿Todavía lo dudas?

Entonces Fred le respondió:

—Yo no abusé solo de esa chica…

Lily se jaló los cabellos al escuchar cómo reconocía su perverso acto.

—¿Tus amigos también participaron?

Fred entonces le respondió:

—Roy también abusó de ella.

Lily lo miró aterrorizada y negó con la cabeza:

—Fuimos los dos…

Ella se apartó aterrada con ese asunto y entonces lo miró y le respondió:

—Eres capaz de ensuciar la imagen de Roy.

Él se rio irónico.

—¿Piensas que Roy era un santo?

—Yo hablé con él… Me dijo que no había ido en mucho tiempo a esa cabaña.

—Cuando se cansó de esa
La Pluma

Llueve sobre mojado.

| Gosto
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