Capítulo 78 “Chupetes y zapatitos”
Luciano sale corriendo trayendo consigo a su maestra, quien apenas puede alcanzarlo.
—Maestra, mire que esa es mi mamá.
—¡Ángela! —le llama Luciano.
—¿Para dónde llevan a mi mamá?
—Luciano, ella va al médico —Ángela se dirige ahora a la maestra—. Le agradezco, Maestra, que al niño sólo lo deje llevar conmigo o con su papá.
—Está bien. Yo me encargo —respondió la maestra.
Al llegar a la clínica Marco también llega en carrera hasta la ambulancia donde traen a Nahomy, quien está despertando.
—Marco, mis hijos, Marco. Por favor busca a mis hijos.
—¡Tranquilícese Nahomy, tranquilícese. Usted, primero póngase bien. Yo me encargo. Ya los muchachos van tras el auto que lleva a las niñas, Luciano esta en el colegio.
—Marco no vi a nadie, apenas divise a un hombre alto y fuerte. No sé quién es.
—Ya la van a atender, y la policía ya está aquí. Deje que la traten. Por favor Nahomy. Ya todo va a estar bien.
—Marco los aeropuertos, los puertos, todas las sali