Olya. 

Siempre he sabido que el interés económico es lo primordial, tenerlo evita traumas, dolor, humillación y ser un mendigo de por vida. La realidad de todo esto es que entre más dinero tengas las discordias crecen, las envidias te rodean y el infierno te persigue y viceversa cuando no lo tienes, las tragedias, las violencias, el hambre, la deserción de todo lo que quieres.

Cuando era pequeña solo quería el afecto de papá y mamá, pero no lo tenía, lo que obtenía era el ver las constantes peleas y la violencia. Ese era mi constante vivir, las humillaciones, los golpes y la pobreza en la que me rodeaba y el diario sufrir.  

El que se hacía llamar mi padre golpeaba a mamá, ella por el miedo que tenía callaba y no decía nada todo para evitar más problemas y golpes, la idea de hablar, ser escuchada y que no le creyeran le