Jasper.
No podía dejar de pensar en la puta situación de mierda. En lo que ese cabrón iba a hacer con ella, en lo mucho que quería salvarla sin poder mover ni un dedo.
¿A quién podía recurrir? Ella no tenía a nadie en el mundo. No había nadie más.
¿En qué puto momento se había ido todo a la mierda tanto? ¿y qué cojones pasaba por mi mente cómo para querer convertirme en el héroe de aquella puta historia?
- ¿Se puede saber qué mierdas ha pasado ahí dentro? – se quejaba Dexter ya