Mi corazón latía con fuerzas al comprender el ambiente en el que nos encontrábamos y aunque sabía que no era correcto, aunque recordaba todo el dolor que había experimentado por amarlo, mi cuerpo lo deseaba y él lo sabía sin siquiera decírselo.
— Dejemos el pasado atrás. Ahora ambos hemos cambiado y por el latir frenético de nuestros corazones, nos amamos. Demostremos que si estamos destinados para el otro, pero que habíamos coincidido cuando no estábamos listos.— Eso no cambia la realidad. Harding, haz tu vida lejos de mí. Porque lo único que tenemos en común, es cuanto sufrimos estando juntos y yo ya no quiero experimentar eso — digo girando mi cuerpo, para abrir la puerta y marcharme — Yo lo sigo experimentando aun estando solo. — dice haciendo que me detenga — Cada vez que voy a nuestro piso o cuando veo cosas d