Capítulo 51. Visita médica
La consulta duró menos que el tiempo que les llevó llegar al hospital. El médico le hizo las preguntas de rigor a Marcelo, las cuales se limitó a responder con precisión. Luego de eso, le extendió una orden para hacerse algunas pruebas y descartar posibles infecciones u enfermedad.
—¿De verdad tengo que hacerlo? —preguntó Marcelo, viendo a Alessandra con ojos de cachorro a medio morir.
—No me digas que le tienes miedo a las agujas —pronunció divertida.
—No te atrevas a reírte de mí, Ale —gruñó con él con las mejillas sonrojadas.
Alessandra le dio un beso en la mejilla.
—Estaré contigo, mi niño grande. No va a dolerte —le prometió sin borrar la sonrisa de su rostro.
Marcelo asintió, nunca le habían gustado las agujas y visitar el hospital era de las cosas que prefería no hacer, por eso trataba de no enfermarse desde que era un niño.
Alessandra se sentó en la silla junto a Marcelo y esperaron con paciencia a que la enfermera encargada de llevarlo al laboratorio lo llamaran. La extracció