– JJ en serio lo siento – empiezo pero ella se gira camina con decisión hasta mí y me da un puñetazo en la quijada con tanta fuerza que siento el sabor de la sangre en mi boca.
– Eres maldito ególatra de mierda, egoísta que solo piensa en sí mismo – me espeta con la respiración acelerada.
Limpio mi labio inferior lleno de sangre, me ha hecho un pequeño corte, sonrió porque tiene fuerza de verdad
– te atreves a reír ¿en serio?
– Fue un buen golpe – comento respirando profundamente, porque sé que tiene todo el derecho de golpearme y acabar conmigo me cabrea que me golpee.
– oh y no has visto nada – dice intentando volver a golpearme pero esta vez vuelvo a sujetar sus manos.
– para y escúchame – comienza a revolverse entre mis brazos con fuerza
– déjame Eryx suélt