Claudia se frotó las sienes,esa migraña le taladraba la cabeza. Abrió las cortinas de la habitación y la luz del sol la encandiló.

-¡No vuelvo a tomar un trago de licor en mi vida!-.Hizo una mueca de dolor.

La esposa de Victor recordó la fuerte discusión que había tenido con su marido el día anterior,Victor había decidido regresar a San Francisco en busca de su hijo.

-¡No te estoy pidiendo permiso!,nada más te estoy notificando-.Le había dicho en tono cortante.

Ahora ella recordaba esa frustración que sintió y la botella de Vodka que tomó movida por los celos que sintió en ese momento.

No le bastaba creer en el buen juicio de Victor,esa cercanía entre Isabella y su marido era peligrosa.

-¡Pinché vieja!-.Masculló muy enojada.

Se peinó con los dedos esos cabellos revueltos que parecían un nido de pájaros,miró su cara al espejo y contempló que estaba hecha una piltrafa humana.

-¿Cuánto más te debo soportar Victor Bustamante? -Expresó mirando su triste apariencia,la voz de Clemencia le s