¿Cómo se sienten las presas frente a sus depredadores? ¿Cómo se siente estar sin salidas? Mi corazón late frenéticamente y no sé si es la misma sensación que siente un ladrón cuando está contra una pared y la policía, o si la está sensación estaba relacionado a la excitación que su mirada podía causar.
Porque sí, justo ahora me estoy excitando y más, cuando sé que él está igual y estamos en medio de espejos que bien podrían mostrar como sucede todo. Justamente, lo que una fantasía sexual insatisfecha, pide a gritos.
‘Cálmate, lujuriosa Kim. estás en una tienda erótica, no puedes hacer… eso’ murmura mi mente y es cuando yo reacciono, alejándome de él.
Regresando a mí yo racional, empujó a Alessandro y me coloco el vestido lo más lejos posible de él.
— ¿Qué le sucede, señor Delacroix? — pregunto incómoda — Nosotros no tenemos este tipo de relación. Así que, márchese, por favor — digo escandalizada
Alessandro rueda los ojos y me da la espalda mientras termina de quitarse la camisa, cu