Pero no iba a dejar que quebrara mi voluntad, aunque siendo sincera no me quedaba mucha. Me enderece antes de responder su pregunta.
-Solo del contrato, de lo demás le dije que en unos días hablaríamos más tranquilas, por ahora no me sentía lista para hablar de nada de eso-
Camine hacia el y tome la toalla que estaba a su lado y comencé a secarle el pelo.
-Te vas a enfermar si no te secas bien, creí que eso lo tenias claro-
-Claro...las voces- comento en un tono de burla-
-Si, las mismas voces que me dijeron que tenia que volver a ayudarte porque te veías del asco la primera vez que hablamos, deberías agradarles a esas voces-
-¿Fueron las voces las que te hicieron volver?-
Sujeto mis manos para que me detuviera y así poder verme a los ojos.
-Si. Y además no iba a dejar que mi chiquito siguiera sufriendo así-
-Bueno ahora mismo tu chiquito necesita algo de atención-
Lo mire confusa y me aleje para ver al bebe ganándome una mirada de incredulidad de su parte.
-Yo lo veo muy bi