Ni siquiera Charlie podía negar que nunca se le había pasado por la cabeza incluir servicios de telecomunicaciones en las operaciones de Horizonte.

Él y Hugo eran desconocidos que se conocieron por pura casualidad, y lo envió a Diez Mil Ejércitos para que ayudara después de salvarlo.

El plan era que Diez Mil Ejércitos eventualmente se equipara con sus propios sistemas satelitales personales, mientras que Hugo también encontraba su lugar en el equipo y superaba su crisis.

Y ahora, estaba claro que las aplicaciones tanto para los satélites de comunicaciones como para satélites de observación remota eran infinitas, así que era momento de priorizar y destinar todos sus recursos a ello.

Al tocar el hombro de Hugo, Charlie sonrió: “Es un buen plan. Horizonte es una empresa legal en Estados Unidos y ahora ha sido adquirida por los Rothschild, así que tenerlos para que incorporen servicios de telecomunicaciones a su estructura es lo que se consideraría el siguiente paso lógico para progres