”Tú…”.

Jacob estaba tan enojado en ese momento, y sus ojos estaban llenos de un rojo resentido.

Tenía las manos atadas cuando se trataba de contraatacar las tácticas de una arpía como Elaine. ‘Un hombre con un bolígrafo no puede razonar con un hombre con una pistola’, así se sentía en ese momento.

En ese momento, Charlie comenzó: “Está bien, no se peleen tan temprano”.

Elaine se marchitó de inmediato tan pronto como sonó la voz de Charlie.

Si en el pasado, Charlie se hubiera atrevido a interrumpir cuando ella regañó a Jacob, le habría arrancado la cabeza por intervenir.

Pero las cosas no eran como solían ser ahora. La fortuna llama una vez a la puerta de cada hombre, y esta vez, era la puerta de Charlie. Ahora que ella no tenía dinero y tenía que vivir en una villa que era propiedad de Charlie, Charlie tenía el rango más importante de la familia.

Para no ser expulsada por Charlie, ella solo podía hacer lo que fuera necesario para complacer a Charlie y no meterse en problemas con