Donovan Bristol
La noche apenas acaba de iniciar, no voy a negar que estoy tenso y no me agrada en lo absoluto la idea de relacionarme de manera sexual con otra persona que acabo de conocer, Dayana se muestra relajada mientras toma su segundo Cosmopolitan y yo un segundo vaso de whisky a la roca.
—Relájate, —toca mi pierna que muevo de manera impaciente.
Suspiro.
» ¿Recuerdas que Eric no dejaba que nadie bese a Judith, ni tocaran sus pechos? —Cuestiona y asiento—. Esta noche nadie puede besarte, —me mira con calma.
—¿Por qué?
&