EVERLY
Jolie Boyer se cubre los senos operados con la camisa de Kavan, pero no se le ve avergonzada y mucho menos arrepentida, todo lo contrario, al igual que Kavan, su mirada venenosa va dirigida a mí, es entonces que entiendo que todo fue planeado por ella.
—¡Cariño! —exclama Analy con asombro.
Kavan se pone los pantalones y con ojos asesinos me fulmina solo a mí, no mira a su madre, no le presta atención, es como si únicamente estuviera al pendiente de mí, estudiando mi reacción.
—Madre ¿qué hacen aquí? —inquiere en tono gélido.
—¿Acaso no puedo visitar a mi hijo? —frunce el ceño Analy.
Quien se vale de lo que sucede y cómodamente se sienta en el sofá, dejando de lado su bolso.
—No es un buen momento —responde Kavan entre dientes.
—¿Por qué? No estabas haciendo nada malo —su madre gira a verme, esperando apoyo femenino—